¿Por qué fallan los riñones y qué ocurre?

Hay muchas razones por las que la función de los riñones puede reducirse. Dos de las más comunes son la diabetes y la presión arterial alta. 

Si los riñones fallan (esto es cuando su función se ve reducida al 15% de lo normal o menos), se producirá menos o nada de orina, y no se eliminarán adecuadamente del cuerpo los productos de desecho. Estos desechos y el exceso de agua se acumularán en el torrente sanguíneo (uremia), y puede que las manos y los pies se hinchen (edema) y aparezca dificultad respiratoria. Puede que suba la presión arterial y se dejen de producir glóbulos rojos suficientes. Puede aparecer sensación de cansancio, mareos y pérdida del apetito.

Si los riñones fallan, es esencial seguir un tratamiento, ya sea por diálisis o a través de un trasplante. Si no se diagnostica y se trata, la insuficiencia renal puede provocar convulsiones (ataques), coma (pérdida de consciencia) o, en último lugar, la muerte.

Diabetes

Hay dos formas principales de diabetes, con distintas causas, pero ambas pueden provocar insuficiencia renal. En el tipo de diabetes 1, el cuerpo no produce insulina suficiente para controlar el azúcar en sangre. En el tipo 2, el cuerpo no puede utilizar debidamente la insulina que se produce. La diabetes no controlada permite que el azúcar se acumule en la sangre, lo que daña los vasos sanguíneos de los riñones y reduce su rendimiento. Muchas personas con diabetes desarrollan presión arterial alta, lo que también puede provocar daños en los riñones. Aunque el tratamiento de la diabetes ha mejorado, sigue habiendo muchas personas con diabetes que desarrollan daños renales.

Presión arterial alta/hipertensión

La presión arterial alta tiene lugar cuando la presión de la sangre contra los vasos sanguíneos aumenta más de lo normal. Esto puede dañar los pequeños vasos sanguíneos de los riñones y hacer que dejen de filtrar adecuadamente. Los motivos de la presión arterial alta no siempre están claros, pero a menudo se relacionan con otros problemas de salud, con la mala alimentación o con un estilo de vida poco saludable, como por ejemplo la falta de ejercicio o el sobrepeso.

Inflamación del riñón (glomerulonefritis)

La insuficiencia renal es bastante común cuando las unidades de filtrado de los riñones, las nefronas, se inflaman. Esto puede provocar que se produzca menos orina, que la sangre y la proteína se filtren en la orina o que se noten las manos y los pies más hinchados.

Otras causas del fallo renal

La poliquistosis renal es una enfermedad hereditaria en la que se forman grandes quistes en los riñones que provocan que estos fallen.

Todo lo que haga que la orina no salga de nuestro organismo puede provocar que la orina vuelva a los riñones, lo que puede dañarlos. Estas obstrucciones pueden deberse a: el estrechamiento de la uretra, que normalmente se desarrolla antes del nacimiento, piedras en el riñón, tumores o el agrandamiento de la glándula prostática en los hombres. Las infecciones de orina reiteradas también pueden provocar insuficiencia renal.

 Causas desconocidas

En alrededor del 20 % de las personas que necesitan diálisis nunca llega a descubrirse la causa de su insuficiencia renal. Estos pacientes a menudo acuden para ser tratados por primera vez cuando la insuficiencia renal ya está muy avanzada y resulta complicado determinar la causa de su enfermedad.

Tratamiento de la insuficiencia renal

El tratamiento más habitual ofrecido a los pacientes de Diaverum es la diálisis. Para ayudar a aliviar la comprensible ansiedad que pueda sufrir acerca de este tratamiento de soporte vital, le ayudaremos a prepararse con antelación para garantizar que esté física, mental y emocionalmente preparado.

El equipo médico analizará con usted los distintos tipos y opciones de diálisis y le ayudará a tomar la decisión más adecuada según sus necesidades médicas y personales. Es bastante habitual prepararse para la diálisis y para un posible trasplante de riñón al mismo tiempo.

 

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